Las lechuzas son animales maravillosos. Pero entre sus muchas características, hay una que nos llama la atención: ¡estas aves rapaces nocturnas son completamente silenciosas en vuelo!Pero, ¿cómo evitan emitir sonidos? ¿Y por qué?
Estos depredadores localizan a sus presas mediante el oído, por lo que es muy importante que no les molesten otros sonidos que puedan molestarles. Sin embargo, la clave de su silencio es el lento batir de sus alas, lo que también les ayuda a encontrar mejor a sus presas.
Otro punto clave es su denso y suave plumón, cuya estructura le permite absorber aire y con ello irradiar sonido. Este sigilo hace que la presa no sea consciente de su presencia, por lo que el depredador aéreo tiene muy poco margen de error a la hora de cazar.
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