El presidente de la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos de Mazatlán, reportó una caída de un 30% en las ventas, debido a los hechos violentos y la percepción de inseguridad en la capital, provocando la ausencia de turismo en el puerto.
También señalo que, solo un negocio ajeno a la cámara cerro de forma temporal, por bajas ventas, mientras que los restauranteros han tomado medidas ante la difícil situación económica, incluyendo la reducción de días laborales, horarios y de personal.