Las mujeres encargadas de la venta de mariscos de Mazatlán, conocidas como changueras, esperan que la temporada de fiestas en diciembre, aumente las ventas, para apoyarlas en los difíciles meses de la caída económica, la cual disminuyo drásticamente entre el 50 y el 70 por ciento, debido a la ausencia de visitantes en los pasados meses por la crisis de violencia en la capital sinaloense.