Brenda Millán, psicoterapeuta encargada de la clínica de la Facultad de Psicología de la Universidad Autónoma de Occidente y fundadora de la clínica SanaMente, comentó que desde el primer enfrentamiento violento popularmente conocido como “Culiacanazo”, ocurrido el 19 de octubre de 2019, la sociedad desarrolló un estrés postraumático, el cual se reactiva con cada atentado anunciado en las noticias o redes sociales, disparando la ansiedad hasta un 4%, provocando sentimientos de preocupación y miedo intenso, a malestares físicos en los afectados, pues múltiples estudiantes universitarios han presentado molestias estomacales.
Brenda ha atendido múltiples casos de crisis por la paranoia que abunda en las personas, quienes se sienten confinados en sus hogares, como en 2020, por lo que recomienda evitar difundir este tipo de noticias, ya sea en charlas familiares o con amigos, como en chats en redes sociales, también a empezar a salir de sus hogares nuevamente, aunque sea temprano y tomando todas las precauciones necesarias.
Durante casi dos meses, los sinaloenses viven en un estado de alerta constante por el miedo a ser víctimas de la violencia en las calles, provocando el aumento en consumo de medicamentos controlados, insomnio, ansiedad, depresión, somatización y psicosis.