En el último cuatrimestre del año, el flujo de migrantes irregulares disminuyó en Mazatlán y en el estado, por lo que diferentes instituciones atribuyen a la violencia que prevalece desde septiembre de 2024, donde el estado forma parte de la ruta del Pacífico mexicano que comprende Jalisco, Nayarit, Sonora Chihuahua y Baja California, donde se traza el trayecto de cruce hacia la frontera de Estados Unidos.
Uno de los casos es el albergue y comedor del migrante de la Parroquia San Francisco de Asís, en la colonia Salvador Allende, donde el encargado Fray José Huertas, indicó que en los próximos días podría aumentar el flujo migratorio, antes de que Donald Trump tome protesta como presidente el 20 de enero.
Otra institución que ha reportado la reducción de migrantes en Mazatlán es Cáritas IAP, donde el fundador y presidente Rafael Martínez Gallardo, señaló que a la semana se atendían en promedio 100 personas, ahora solo de 10 a 12.
Finalmente, el director del DIF Municipal, José Luis Gómez Nuñez, mencionó que se cuenta con un centro de asistencia social para migrantes, él cual de momento no está en activo, sin embargo, menciono estar preparados para cualquier situación; se cuenta con cocina, con camas, con equipo psicológico, con el personal 24 horas para poder atender cualquier situación.
